De todos es conocida la relación entre el sistema digestivo y el sistema nervioso. Entender la conexión intestino-cerebro nos permite comprender como las emociones interfieren en la salud digestiva y viceversa.
Contribuir a un correcto funcionamiento de la microbiota conduce a un bienestar no sólo digestivo sino también emocional. Cconocer los hábitos alimenticios, de ejercicio o de estilo de vida nos ayudará mantener un buen estado de salud general.